Rosario tiene una tasa de homicidios 5 veces superior a la media nacional
Ariel Larroude, a cargo del Observatorio de Política Criminal de la Ciudad de Buenos Aires, analizó la situación de la ciudad respecto de la criminalidad y comparó estadísticas
Para el especialista en criminalidad Ariel Larroude, la situación que atraviesa Rosario en relación a la violencia callejera y el narcotráfico es un tema de preocupación a nivel nacional que ya traspasó los límites de la ciudad. "El miedo es que se expanda a otras localidades", indicó el abogado, a cargo del Observatorio de Política Criminal de la Ciudad de Buenos Aires.
Ariel Larroude es abogado, docente y especializado en criminalidad y seguridad pública. Este lunes fue entrevistado en LT8 y analizó la situación de Rosario respecto de los índices de violencia callejera ligada a las disputas entre bandas criminales. "Es un proceso histórico que lleva más de diez años", indicó.
La particularidad es que el notorio crecimiento de la violencia en Rosario no se refleja solo en las cifras de homicidios registrados los años anteriores, que a fin de 2022 alcanzó los 288 que superaron el récord histórico. Sino que también se plasma en la tasa de homicidios a nivel nacional. Según remarcó Larroude, la tasa en todo el territorio argentino es de 4,6 homicidios cada 100 mil habitantes, mientras que en Rosario el 2022 cerró con 22 crímenes cada 100 mil habitantes.
"Da cuenta de la disparidad de lo que pasa en Rosario con lo que sucede en el resto del país", remarcó el especialista. "Se ve con mucha preocupación esto, no solo de los rosarinos o santafesinos sino de toda la Argentina. El miedo es que se expanda a otras localidades", alertó.
En ese sentido Larroude explicó que la situación actual en Rosario es consecuencia de "un proceso histórico que lleva más de diez años y tiene tres factores". Uno es "la alta tasa de consumo de estupefacientes a nivel nacional, Argentina triplicó la tasa de prevalencia anual en el consumo de cocaína y marihuana".
Por otro lado, remarcó, hay falencias en la estructura policial de la provincia. "La policía de la Unidad Regional II está fragmentada desde hace una década, en connivencia con ciertos sectores del delito, por lo cual no puede cumplir con el mandato constitucional que tienen que es el de prevenir el delito".
Por último sostuvo que en Rosario se da un fenómeno de "falta de liderazgo claro en las estructuras criminales". En ese sentido explicó que en otras regiones esos liderazgos "posibilitan la no ruptura del diálogo entre estas bandas que se disputan el territorio".
Además remarcó las consecuencias sociales a partir de esta problemática. "Hoy vemos pibes cada vez más chicos inmersos en la cultura criminal y la violencia que asola a la ciudad. Ante eso se ve la falta de capacidad estatal para dar respuestas", cerró.