Tras un nuevo crimen, Villa Gobernador Gálvez "suplica más seguridad" a Nación y provincia
El intendente de Villa Gobernador Gálvez, Alberto Ricci, reclamó de manera encendida colaboración a los distintos poderes del estado para combatir la ola de asesinatos y extorsiones que asolan a la ciudad y al Gran Rosario. Este lunes se realizó una manifestación para pedir justicia por el crimen de Fabricio Guiral, el joven de 21 años, asesinado en su casa, después de que el negocio de su padre fue blanco de intimidaciones.
“Los municipios no tenemos los medios para enfrentar esta situación. Pero lo que asumo es pedir, suplicar. En este momento estamos suplicando que nos ayuden y nos den una mano”, aseguró Ricci, en el programa "El primero de la mañana", que se emite por LT8, y reclamó “un trabajo fuerte y en conjunto” de todos los sectores para resolver esa problemática.
Además reveló que el último fin de semana se registraron “12 hechos de amenazas y amedrentamiento” de distintos negocios de la ciudad, que aún no se repuso del asesinato de Fabricio. “Estamos muy tristes y conmovidos por todo lo que viene sucediendo desde hace mucho tiempo, mucho antes del crimen de Fabricio. Esto no es una cuestión de simples amenazas. Hablamos con la Justicia, con el Ministerio de Seguridad, con los fiscales, pero no le podemos encontrar la vuelta ni la solución”, señaló Ricci.
Asimismo, contó que el viernes viajó a Buenos Aires para reunirse en autoridades de la Secretaria de Seguridad de la Nación. “Fuimos a suplicarle que Gendarmería no se quede en los límites de Rosario, sino que extienda sus recorridos. El viernes a la noche comenzamos a recibir ese apoyo de Gendarmería, pero no alcanza. Las policías Federal y de la provincia también están trabajando, pero no alcanzan”, remarcó.
“No queremos más muertes, ni balaceras, ni amenazas. Es hora de decir basta y empezar a trabajar en forma conjunta. Se formó el Consejo de Seguridad y los gobiernos locales no estamos presentes, ya que conocemos el territorio. Sentémonos a trabajar en serio. El pueblo y los intendentes decimos basta. No podemos vivir así. No somos dignos de salir a la calle o de tener un comercio”, insistió Ricci.
Y dio un ejemplo que evidencia la grave situación que se vive en Villa Gobernador Gálvez: "Al dueño de una cancha de fútbol 5 le están pidiendo 10 mil pesos por semana". Y agregó: “Hasta dónde tenemos que ir. Hay que tomar estos temas en serio y trabajar conjuntamente. Desde el municipio sólo podemos gestionar. Estamos en la calle, con Tránsito y Control Urbano, pero eso es limitado. No tenemos los medios para salir a enfrentar esta situación. En este momento estamos suplicando que nos ayuden y nos den una mano”.
“El viernes le supliqué a la secretaría de Seguridad de la Nación que nos brindaran ayuda porque la situación nos está desbordando y nos están matando. No puede ser que tengamos una veintena de muertos por año por este tema. Los que tienen que actuar, por qué no se ponen los pantalones largos. Vamos atrás de los homicidios. Eso no sirve. Tenemos que ir adelante. El pueblo anoche dijo basta y esto no terminará en una marcha como la de anoche. Todos nos estamos organizando para pedir paz, justicia y seguridad”, agregó Ricci.
Ricci dijo que no sabe quiénes están detrás de las balaceras y extorsiones, y apuntó a los funcionarios del Ministerio de Seguridad de la provincia. . “Nos dicen que las órdenes salen desde las cárceles. Bueno, muchachos, actúen ahí. El ministro anterior decía que tenían la sábana corta. Que si ponía más policías en Gálvez, desprotege el sur de Rosario. Basta con el discurso y pasen a las acciones. Si saben que hay teléfonos en las cárceles, actúen ahí, y controlen los teléfonos. Así pasa el tiempo y contamos los muertos. No tiene que ser así”, señaló.
“Estoy muy angustiado y dolido. No sólo por Fabricio, sino por todas las familias que pierden a sus hijos. Esto se tiene que terminar de una vez por todas. Tenemos que sentarnos y que cada uno se haga responsable de lo que le toca. No miremos para el costado”, remarcó Ricci, y pidió “más celeridad en las investigación de las extorsiones, hoy tenemos la tecnología a disposición. Estamos corriendo atrás de la tortuga y no la podemos alcanzar. Esta situación supera a todos y no encontramos las respuestas. Estamos yendo detrás de los muertos”.
